La nueva infraestructura se ha levantado en el mismo espacio que ocupaba el viejo depósito
Las obras de construcción del nuevo depósito de almacenamiento y abastecimiento de agua potable entran en su recta final con la previsión de estar finalizado y en pleno funcionamiento en las próximas semanas. Se trata de una infraestructura de nueva construcción que sustituirá, en el sistema de abastecimiento, al antiguo depósito circular que se encontraba en un avanzado grado de deterioro.
Este nuevo depósito tiene una planta rectangular de 26,50 por 31,50 metros de longitud y 5 metros de altura. La capacidad total es de 3.800 metros cúbicos.
En estos momentos, ya completadas las obras de construcción y el sellado e impermeabilización del techo, se está encarando la fase final del proyecto con la limpieza interior del depósito con agua a presión e hipoclorito, la instalación de válvulas motorizadas, el telecontrol del sistema automático de entrada y salida y la integración de las tuberías de conexión en el sistema general de abastecimiento, para finalmente realizar las pertinentes pruebas de carga para asegurar la estanqueidad de la cimentación y comprobar el correcto funcionamiento del mismo.
Además, se han utilizado los materiales resultantes de la demolición de antiguo depósito y del vaciado del terreno dónde se han construido este nuevo depósito para rellenar su perímetro, dando como resultado la integración de esta infraestructura en el entorno dejando prácticamente todo su volumen rasante con el terreno o enterrado en el mismo. También se está acometiendo el vallado perimetral de la instalación y el acondicionamiento del terreno de alrededor del depósito para mejorar el entorno del mismo.
El jefe de servicio de Aqualia, empresa concesionaria de la gestión integral del agua en la Mancomunidad de Municipios de La Serena, Fernando Callejo, apuntó que con la puesta en servicio de este nuevo depósito, que sustituye al antiguo depósito circular que presenta importantes pérdidas de agua por fugas y filtraciones, por una parte, «va a suponer un importante ahorro de agua», y por otra, «ayudará a mantener un mayor volumen de agua potable almacenada para su distribución a las poblaciones».
Las obras están siendo ejecutadas por la empresa placentina construcciones Araplasa y han contado con un presupuesto de 596.407,26 euros, financiados por la Junta de Extremadura.